Lloraré al Silencio ya que es el único que me escucha
Reiré con la Soledad que es mi fiel compañera
Dormiré con el Olvido que me protege de los dulces sueños
Creceré sin dejar ningún legado a mi paso
para que al partir hacía un destino incierto
incierto sea también el camino recorrido.
Solo la Duda será mi maleta de contenido eterno
La Razón hablará pidiendo ser escuchada pero,
por desgracia para ella, la Resignación no la deja hablar.
Solos la Paciencia y el Dolor caminarán por la existencia.
Una existencia tan vacía como la Esperanza que la habita.
Tan muerta como el Amor que se suicido aquel día.
Nada y nadie. Nadie y nada. Dos caras de la misma monda.
Moneda sin valor alguno que viaja de mano en mano
buscado en silencio aquello que olvido haber perdido.
Moneda de Amor o Cariño pero sin valor
que sin tener nada mejor que hacer gasta su existencia en silencios bajo la mesa.