martes, 27 de marzo de 2012

La Noche



Al abrigo de la Noche los dolores desaparecen,
te arropa con su manto de estrellas con gesto protector.
La Noche es una madre protectora que con sumo cuidado mima el corazón roto.
Lo desinfecta y cose y con infinita paciencia lo mece en su seno;
mientras le viento nocturno,
susurra la nana de los astros
Dulce melodía que sana las heridas.
La Noche es una madre comprensiva.
Siempre está allí cuando se la necesita y cuando no también pero se aparta y no molesta;
se queda callada en su manto de estrellas.
Sabe cuando acercarse, cuando se quiere su abrazo y cuando se necesita la soledad.
En la Noche los dolores se vuelven sordos y los recuerdos mudos.
Y es cierto que tiempo todo lo cura pero…
 no es nada más que la panacea que la Noche suministra.
Por la Noche puedes soñar y ella te deja;
te mece entre sus brazos usando la luna como almohada.
La Noche es una sabía protectora del alma humana.
La cuida y repara con cuidado poniendo ello toda su aura.
Pero un defecto tiene la Noche.
Y es que una herida que ya es nula la abre y hurga.
Todo con el deseo de que se cure del todo.
A la Noche no la vale un “ya no me duele” o “si ni siquiera lo noto”.
Una herida es existe y su misión como madre protectora
es cuidarla y tratarla para que sane bien y sin dejar marca.
Es por eso que la Noche es odiada por mucho pero también es amada por muchos más.
La Noches te cuida, respeta y escucha.
Jamás te hiere o grita.
Siempre te protege y mima.
Abre tu mente al infinito y cuida tu cuerpo en la tierra.
Por eso la Noche es la cura del alma,
Es el alimento del corazón.
Y al almohada de los sueños.
Por eso te deseo:
Buenas Noches.

No hay comentarios:

Publicar un comentario